miércoles, 27 de diciembre de 2006

Nadie será sometido a torturas



“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes”. Artículo 5 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, aprobada en 1948.

André Gide afirmó en alguna parte que ya todo ha sido dicho, pero como nadie escucha hay que volver a empezar. De dicha afirmación parte este artículo, que no pretender ser original sino recordar cosas ya dichas, de mejor manera que lo que uno podría decir.

En Vigilar y castigar (1975), Foucault se preguntaba, entre otras cosas, si el encarcelamiento es más humano que la tortura, para ello desmenuzó la evolución y las razones fundamentales del sistema penitenciario y puso en duda el proyecto de encerrar al delincuente para regenerarlo y reinsertarlo en la sociedad. Las primeras paginas de este libro están llenas de retratos históricos que relatan la tortura como una forma de desgarre social con apariencia individual que esconde, sin embargo, la simbología más cruda del escarnio colectivo de cualquier sociedad (la de la Edad Media, en este caso). En las ceremonias del suplicio, el personaje principal es el pueblo, siente un efecto de terror por el espectáculo del poder cayendo sobre el culpable. El papel del pueblo es ambiguo se lo llama como espectador, se le convoca para que asista a las exposiciones, a las retractaciones públicas. Es preciso no sólo que la gente sepa, sino que vea con sus propios ojos, se atemorice, sea testigo. El pueblo reivindica su derecho a comprobar los suplicios y a la persona a quien se lo aplican. Tiene derecho también a tomar parte en ellos.

Las protestas por el suplicio se encuentran por doquier en el siglo XVIII. Hay que castigar de otro modo: desenlazar la venganza del príncipe y la cólera contenida del pueblo, por intermedio del ajusticiado y del verdugo. En estas ceremonias se percibe el entrecruzamiento de la desmesura de la justicia armada y la cólera del pueblo al que se amenaza. Surge una necesidad de castigo sin suplicio, de respetar su “humanidad”.

A partir del siglo XIX se ha asistido a la conformación de un nuevo tipo de estructura social que ha reemplazado a la antigua sociedad del espectáculo por una sociedad de la vigilancia sustentada en dispositivos disciplinarios que aseguran el control y la “normalidad” de los individuos que forman parte de ella.

Pero con el paso del tiempo, con la "evolución" de la sociedad, vemos como el espectáculo pasó de ser de masas a ser de carácter privado y exportable en muchos casos. En su ensayo de psicopatológia "El nazismo como problema sexual (1940)", H.E. Kaminski, postula que el sadismo de los verdugos llega muchas veces a los límites de la patología sexual. "Es el complejo de inferioridad de los anormales sexuales el que reacciona con los tormentos y martirios de víctimas inocentes, provocando en los verdugos sentimientos de voluptuosidad que no son capaces de experimentar de otro modo.

La característica de los verdugos es justamente la ausencia de todas las contenciones morales, actitud que ponen al servicio de un orden político autoritario o totalitario. Basados en la idea de que el poder estatal está por encima de la sociedad, del conjunto de la población, creen racionalmente que todo está permitido. Los órganos sexuales y el ano de hombres y mujeres son los sitios preferidos para aplicar la picana eléctrica. Ideología y, ahora sí, sadismo se asocian estrechamente. A esos hechos debemos sumar, en algunos casos, el componente religioso. Los campos de concentración nazis registran las más crueles atrocidades en ese sentido. Durante los interrogatorios los S.S. obligaban a dos presos a masturbarse mutuamente, obligándolos luego a lamer el uno la eyaculación del otro (Kaminski).

Las aberraciones, vejaciones y violaciones son frecuentes en las casas de tortura y la lectura de los testimonios causa verdadero espanto. Pero no deja de ser necesaria la lectura de dichos testimonios.

La Argentina no esta ajena a estas aberraciones, tiene en Leopoldo "Polo" Lugones (hijo), a un "innovador" en materia de torturas. Le debemos "El tacho", inspirado en la "garrucha": se elevaba con violencia al detenido, atado de pies y manos y se lo dejaba caer en un tacho repleto de inmundicias. Lugones fue también un adelantado, aplicaba la picana, siempre bajo el control de un tercero, generalmente apodado "El Doctor", encargado de controlar el pulso y las reacciones físicas. La picana —también llamada "René"— se fabricaba con un acumulador y una bobina especial que levantaba el voltaje a la que se agregaba, en el extremo de cada cable, un mango aislante.

Pero siguiendo con la "evolución", nuestro país sufrió una merma de "innovadores" y tuvo que importarlos. En 1954 comenzó la guerra de la independencia de Argelia. Se calcula que se perdió la vida de 300.000 argelinos y se vieron obligados a huir del país más de un millón de colonos europeos. El ejército francés sufrió más de 24.000 bajas, y murieron alrededor de 6.000 colonos. Según detalla Diego Llumá en el número 422 de Todo es Historia, "el desembarco encubierto de los tenientes coroneles Patricio J. L. de Naurois y Francois Pierre Badie se produjo en 1957, el mismo año de la batalla de Argel. Ése fue el origen del curso “Guerra revolucionaria y contrarrevolucionaria” que instaló la problemática en los cuadros que dos décadas más tarde diseñarían el plan que culminó en la debacle humanitaria de los años setenta". Los franceses formaron, entre otros, a Ramón Camps y Reynaldo Bignone. La influencia gala en los mandos argentinos no se limitó sólo a la destreza en el uso de la picana: el movimiento de "Cursillos de la cristiandad" dotó a la derecha local de una mística inspirada en los "Coopérateurs du Christ Roi": Onganía y Lanusse eran alumnos de dichos cursos. Años después una Escuela, fundada en 1946 y ubicada en Panamá (en 1984 reubicada en Georgia, Estados Unidos), se hará famosa por los cursos y por lo aplicado de sus egresados. Dicho establecimiento enseñó a matar y a torturar a unos 64.000 uniformados de 18 países latinoamericanos. Entre sus egresados mas sobresalientes encontramos a Manuel Noriega (Panamá), Hugo Banzer (Bolivia), Roberto D'Aubuisson (El Salvador), Héctor Gramajo (Guatemala), Roberto Viola (Arg), Leopoldo Galtieri (Arg), Jorge Videla (Arg), Guillermo Rodríguez (Ecuador), Vladimiro Montesinos (Perú). También fue un alumno destacado de la escuela nuestro conocido Mohamed Alí Seineldín. Antes del golpe de Estado de Argentina de 1976, se habían graduado en la Escuela del Ejército de las Américas, 600 militares argentinos. De éstos últimos, 58 militares tenían como plan de estudios, en el período 1970-1975, determinados cursos escogidos: en ellos se graduaron once en "operaciones de contrainsurgencia", siete en "contrainsurgencia urbana", trece en "operaciones en el monte", cinco como "oficial sin mando en inteligencia militar" y seis en "interrogatorio militar". De mas esta aclarar que, durante los gobiernos de los dictadores Jorge Rafael Videla, Roberto Viola y Leopoldo Galtieri los métodos de inteligencia y las técnicas de la lucha contrainsurgente, que incluían el uso de la tortura, el secuestro y la desaparición de opositores usados por la dictadura argentina fueron exportados hacia Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala.

Pero como estamos hoy? El presidente norteamericano admitió que hay centros de detención de la CIA fuera del territorio de Estados Unidos, pero no quiso revelar su ubicación, como tampoco los métodos empleados para interrogar a los sospechosos de terrorismo encerrados en ellos. Israel, el único país del mundo que ha legalizado la tortura, modificó su legislación en 1999 (luego de presiones) pero dejó un resquicio legal: los interrogadores todavía pueden usar la tortura y eludir el procesamiento acogiéndose a la eximente de necesidad como defensa posterior a los hechos. Hasta la fecha, no se sabe que ningún agente de los servicios de seguridad israelíes haya sido enjuiciado por la comisión de torturas. En México, unos 588 casos de tortura fueron documentados por los procuradores de derechos humanos estatales y nacionales entre 1990 y 2003, de acuerdo a un estudio recientemente publicado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). De acuerdo con el estudio de la CNDH, en más del 83% de los casos de tortura investigados por la comisión, los abusos permitieron obtener la confesión de la víctima.

Hoy en las cárceles de Estados Unidos en Guantánamo (Cuba) o en Abu Ghraib (Irak) el enemigo principal es el islamismo; presentado ante el mundo como sinónimo de terrorismo global por el único país imperialista. Cárceles que son una acabada muestra de hasta dónde puede llegar a situarse en el alma de los seres humanos la indignidad infame del verdugo opresor hacia un semejante.

Las técnicas de torturas empleadas en dichos lugares no se diferencian demasiado de las descriptas anteriormente, solo que ahora son efectuadas con elementos más refinados.

La República Argentina ratificó sin reservas la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes el 24 de septiembre de 1986. Sin embargo, año a año se repite la preocupación de Amnistía Internacional, entre las principales se incluyen la tortura y el maltrato de personas detenidas por parte de miembros de las fuerzas de seguridad, incluyendo menores; las denuncias de trato cruel, inhumano o degradante en los centros penitenciarios y de detención y la falta de investigaciones prontas, independientes, exhaustivas, y concluyentes sobre tales denuncias.

La prohibición legislativa de la tortura no es suficiente, hace falta una voluntad política, y mas aun, hace falta una condena social a aquel que defienda la tortura como un medio valido.

Ciru

martes, 26 de diciembre de 2006

Busco Pasantía y no ser explotado


“En el contexto actual, la Universidad tiene la función, no sólo de educar a los futuros profesionales, sino también de acercarlos al mercado laboral a través de la realización de convenvios de trabajo con empresas y entidades públicas, como son las pasantías. Las prácticas profesionales son parte fundamental de la formación de los estudiantes ya que les brinda la posibilidad de poner en acción lo aprendido en su carrera académica e incorporar experiencia previa a la graduación.”

A principios del siglo XX, Mariategui definía al problema del aborigen como un ser que estaba a merced del latifundista, aun a pesar de que se impartan “las ordenanzas sabias y prolijas, elaboradas después de concienzudas encuestas”, si extrapolamos la idea vanguardista de Mariategui a uno de los problemas actuales, se entendería como que el alumnado queda a merced del empleador aun a pesar de las leyes que protegen al joven que realiza sus tareas de pasante.

Pero ¿Qué es una Pasantía? Para precisar que es una pasantía nos regiremos bajo la definición en la ley 25.165 Sancionada el 15 de Septiembre de 1999, bajo los firmantes Pierri-Menem-Pereyra Arandía de Pérez Pardo-Oyarzún:

“ARTICULO 2 - Se entenderá como "pasantía" a la extensión orgánica del sistema educativo en el ámbito de empresas u organismos públicos o privados, en los cuales los alumnos realizarán residencias programadas u otras formas de prácticas supervisadas relacionadas con su formación y especialización, llevadas a cabo bajo la organización y control de las unidades educativas que lo integran y a las que aquellos pertenecen, según las características y condiciones que se fijan en convenios bilaterales estipulados en la presente ley.”

El régimen de pasantías presenta grandes falencias a la hora de ser aplicado, casos de comercios que llenan sus puestos de trabajo con jóvenes para “instruir” y luego al momento de exámenes utilizan todos los métodos de coerción posibles para que el joven no utilice sus días justificados de estudio porque el empleador se queda sin gente a la cual recurrir, es una practica habitual cuando no existe un organismo interesado en controlar.

Existe un sueldo mínimo que no condice con las tareas y obligaciones de los jóvenes, que entonces asumen una condición de suma explotación, en nuestra Universidad el acuerdo permite hasta 5 jornadas semanales de 6 horas cada una, pero poco se manifiesta sobre un sueldo digno para el pasante y (aunque no existan sueldos dignos), cuando menos se deben pretender estar acordes a las responsabilidades, tiempo y capacidades que el pasante tendrá al realizar dicho trabajo.

Quizás la mayor falencia es la extraña relación entre el pasante, su puesto de trabajo y la finalidad de la carrera que eligió, entonces tenemos casos de jóvenes que estudian Contaduría y trabajan en algún mayorista acomodando productos en los pasillos, o estudiantes de comunicación social realizando pasantías de Call Center –esto ultimo mas precisamente en la UBA-. Haciendo caso omiso a los principales pilares que mantiene la idea de una pasantia, siendo:

- Brindar experiencia práctica complementaria de la formación teórica elegida que habilite para el ejercicio de la profesión u oficio.

- Contactar en el ámbito en que se desenvuelven empresas u organismos públicos afines a los estudios que realizan los alumnos involucrados.

- Capacitar en el conocimiento de las características fundamentales de la relación laboral.

- Formar al estudiante en aspectos que le serán de utilidad en su posterior búsqueda laboral.

- Ofrecer la posibilidad de conocer y manejar tecnologías actualizadas.

- Contribuir a la tarea de orientación vocacional dirigida a efectuar una correcta elección profesional futura.

La Universidad de La Matanza, dada su ubicación permite el ingreso a la Universidad a jóvenes de clase media y baja, por consiguiente, es inevitable que mas pronto que tarde, estos jóvenes necesiten de trabajo para cubrir sus gastos universitarios, y en la carrera de Ciencia Política no es la excepción. Pero existe un problema mucho mas grave que los anteriormente citados… es que siquiera existe un plan de pasantías.

Algunos alumnos estamos por llegar a las 15 materias básicas para “calificar” en las pasantías. Al preguntar sobre trabajos acordes a nuestra formación, solo obtuvimos como respuesta un escalofriante “eeeeh” en el “centro de estudiantes” y con la posterior afirmación de “en las pasantías se le da prioridad a los de Ingeniería y luego a los de Económicas”, dejando nuestras posibilidades completamente a la deriva.

La carrera de Licenciatura en Ciencia Política, presenta un panorama disímil entre su turno matutino y vespertino, sin embargo presenta un problema en común.

El realizar esta nota, no es mas que un llamado de atención a los estudiantes, ya sea que necesiten dichas pasantias o simplemente el contar con la existencia de ellas, tampoco pretendo culpar a esta universidad de la pauperización del trabajo de los pasantes en todo el territorio nacional, sin embargo, no podemos permitir que aquí suceda lo mismo, debemos ser instrumentos de cambio, exigir derechos si se lo quiere…

Solo una cara Bonita.

domingo, 17 de diciembre de 2006

El primero siempre cuenta.



INIMPUTABLES…

Alguien esta leyendo estas líneas, alguien esta sumándose. Tenes en la mano el primer numero de Inimputables, una revista de alumnos para alumnos. Esta presentación es un nacimiento, es una partida, pero por sobre todo, es un intento. Intentamos crear un espacio, que posibilite compartir ideas y visiones críticas, sin fantasías de supuestos esclarecidos.

Entendemos la política como praxis, no definitiva, sino constructiva, inacabable por propio peso, por definición como búsqueda indefinida. Por eso intentaremos no dar sentencias a repetición para ganar una batalla, sino que intentamos discutir desde la contradicción lógica de la construcción permanente, para enfrentar la guerra definitiva de interpretaciones cosmológicas que constituyen sujetos. Para pararnos de una vez por todas en el mismo plano (que no es lo mismo que el mismo bando), en el plano de la subjetividad que sujeta a una interpretación del mundo falible, variable y no a una verdad, a una verdad absoluta e invariable.

La gente nos ha estimulado y también nos ha desanimado, pero hay fuegos que encienden, dice Galeano, y esa idea que nació en una charla, en un pasillo perdido, hoy esta en tus manos, prendió. Sabemos de lo difícil que es, en las Ciencias Sociales, construir espacios que perduren en el tiempo, quizás lo logremos o quizás no, pero lo que ya logramos es el haber dado el primer paso, el primer aporte hacia la constitución conjunta (como lo prevé la reforma universitaria de 1918) de una carrera.

Hoy sos un inimputable más, se te acusa de pensar, sobretodo de hacerlo de manera distinta pero no pueden juzgarte por eso, mucho menos condenarte...

Iván Cerda

Manuel Fernandez

Mariano Giussani

Emiliano Pardavila

Sebastián Zabalia